Nuestros elementos prefabricados de hormigón en Cantabria son componentes previamente confeccionados para una instalación directa en cualquier proyecto de construcción. Se fabrican vertiendo hormigón fresco en moldes para el fraguado final, obteniendo así las piezas requeridas. Posteriormente, estas piezas terminadas pasan por rigurosos controles de calidad para asegurar el cumplimiento de las exigencias del sector de la construcción.

 

Confeccionados a medida con hormigón fresco y elementos prefabricados de hormigón en Cantabria

 

Los elementos prefabricados se almacenan para su transporte a la obra, donde llegan en óptimas condiciones. De esta manera, los prefabricados se presentan como una solución industrial para una amplia variedad de obras. Este método de fabricación previa ofrece seguridad, rentabilidad y eficiencia, incrementando notablemente la productividad del proceso constructivo. Entre las ventajas de estos productos se destacan la rapidez en la ejecución de los trabajos, la reducción del costo de mano de obra, la garantía y calidad de las piezas, y un menor impacto ambiental. Ofrecemos una amplia gama de prefabricados de hormigón, incluyendo paneles y otras estructuras. Algunos de nuestros productos son:

 

Viguetas de hormigón: ideales para la rápida ejecución de forjados, ofreciendo resistencia y control durante la obra.

Muros de hormigón prefabricado y pilares: muros tipo sandwich con acabado visto exterior e interior, y pilares de hasta 5 m de altura para diversas aplicaciones.

Prelosas: elementos prefabricados que sirven como encofrado para losas, ideales para el acabado de plantas de garaje.

Ferralla: utilizada para el refuerzo de estructuras, incorporada parcial o totalmente en el hormigón.

 

Además de grandes prefabricados, fabricamos también pequeños componentes de hormigón como bordillos, bloques, casetones, ladrillos acústicos y bovedillas. Nuestra amplia experiencia y profesionalidad nos avalan para ofrecer los mejores servicios de fabricación de prefabricados de hormigón en varias regiones. Para más información y presupuestos, no dudes en contactarnos.

 

Productos de hormigón en Cantabria

 

Nuestros productos dehormigón en Cantabria tienen una amplia gama de usos y aplicaciones en la construcción. Aquí te detallo algunos de los principales:

 

Bovedillas para forjados: Son elementos de apoyo del hormigón en los forjados, colocados entre viguetas. Las bovedillas de hormigón ofrecen un monolitismo óptimo para el comportamiento mecánico del forjado y también actúan como aislante acústico.

Celosías decorativas de hormigón: Ideales para delimitar espacios en terrazas o porches, agregando elegancia a la decoración. Estas balaustradas o barandillas ofrecen un toque estético además de funcionalidad.

Bordillos de carreteras y pavimentos de aceras: Especialmente útiles en aceras y carreteras, los bordillos de hormigón son elementos destacados que ofrecen una delimitación clara y resistente.

Bloques y ladrillos: Son ampliamente utilizados en la construcción de edificios y viviendas. Los bloques de hormigón, prefabricados con hormigones finos o morteros de cemento, se emplean tanto en muros como en paredes.

Recuerda que en Preconor ofrecemos soluciones completas para la producción de productos de hormigón, con nuestra maquinaria especializada como bloqueras. Desde hace muchos años, nos hemos dedicado a fabricar prefabricados de hormigón en Cantabria, incluyendo máquinas estacionarias con circuitos totalmente automáticos para el manejo, curado y empaquetado. No dudes en contactarnos para más información sobre nuestras soluciones y productos.

 

Viguetas de hormigón en Cantabria

 

En la industria de la construcción, la demanda de viguetas se satisface mediante una combinación promedio del 80% de pretensado y el 20% de hormigón armado, complementadas con bovedillas en obra. Anteriormente, las bovedillas solían fabricarse con ladrillo, pero hoy en día se emplean diversos materiales como diferentes tipos de hormigón, madera o poliestireno, entre otros.

 

Los costos de transporte hasta el lugar de trabajo se mantienen bajos debido al peso reducido (aproximadamente 15 kg/mL) y al volumen de las viguetas. Además, se pueden utilizar grúas de menor capacidad para colocar las piezas semiacabadas en obra, lo que permite una gestión más directa y económica de la construcción de plantas por parte de propietarios privados, sin necesidad de grandes esfuerzos mecánicos.

 

Las viguetas pueden adquirirse en determinadas longitudes modulares como productos de almacén, lo que elimina la necesidad de encargar previamente el «forjado» o solicitar su confección según detallados planos. A diferencia de las prelosas, las viguetas no incluyen piezas embutidas como cajetines, conductos o huecos, lo que significa que estos elementos deben ser colocados manualmente en obra.

 

No se requiere una armadura adicional, ya que el forjado se completa con hormigón in situ. Durante el fraguado del hormigón, el apuntalamiento de las viguetas pretensadas no es necesario, o solo se requiere mínimamente. La cara inferior del forjado no está lista para empapelar ni pintar de manera inmediata, y en caso necesario, debe ser enlucida in situ.

 

Prelosas de hormigón en Cantabria

 

La prelosa, también conocida como losas de filigrana o losas semiacabadas, es un componente ampliamente utilizado en la construcción residencial e industrial.

 

Su preferencia radica en su reducido peso propio, lo que permite el uso de grúas de menor capacidad en obra, lo que a su vez reduce los costos de transporte en comparación con elementos prefabricados completos de hormigón. Por lo general, la prelosa está compuesta por una placa de hormigón de 40 a 60 mm de espesor, armaduras longitudinales y transversales, y celosías rígidas en dirección longitudinal. Estas celosías, formadas por barras de armadura soldadas, garantizan la unión entre la pieza prefabricada y el hormigón in situ mediante su superficie rugosa y las diagonales de las celosías.

 

En la fábrica de prefabricados de hormigón, se instalan en la prelosa piezas como cajetines, conductos, etc. Luego, en obra, se añade una capa adicional de armadura, especialmente en las juntas, que debe fijarse adecuadamente para garantizar la durabilidad y mantener el recubrimiento de hormigón necesario. Además, se incorporan conductos adicionales para cables eléctricos, y luego se completa la losa mediante el hormigonado in situ. Durante el fraguado del hormigón, es necesario apuntalar la prelosa desde abajo. La cara inferior de la prelosa cuenta con un excelente acabado superficial, lista para empapelar o pintar, sin necesidad de revocar, aunque es necesario emplastecer las juntas formadas entre las placas de hasta 3 m de ancho.